La realidad cotidiana de hoy es bastante diferente de la que era hace un par de semanas atrás. Estamos aprendiendo a hacer muchas cosas de nuevas maneras, desde cómo trabajamos de forma remota hasta cómo nos relacionamos con nuestros amigos y vecinos.
Durante años, todos hemos escuchado hablar de las características mas deseables en las casas que los compradores están buscando, desde cocinas renovadas hasta baños remodelados, dormitorios principales amplios y mucho más. Sin embargo, lo último en la lista, podría sorprenderle: oficinas en casa.
Diez millones de estadounidenses perdieron sus trabajos en las últimas dos semanas. Se espera que la siguiente tasa de desempleo anunciada el 8 de mayo sea de dígitos dobles.
Hay una tonelada de información disponible sobre bienes raíces en las noticias y en internet. Puede a veces ser extremadamente confuso, especialmente en tiempos de incertidumbre como el que estamos enfrentando en este momento.
Como nuestras vidas, nuestros negocios y el mundo en el que vivimos están cambiando día a día, todos nos quedamos preguntándonos cuánto durará esto. ¿Cuánto tiempo sentiremos los efectos del coronavirus? ¿Qué tan profundo será el impacto?
Estamos en un mercado de bienes raíces cambiante, y la vida en general también está cambiando. Desde cómo compramos alimentos y los preparamos hasta las formas en que podemos interactuar con nuestros amigos y vecinos.
La angustia causada por el coronavirus tiene a la mayoría de las personas nerviosos con respecto a su salud y la situación financiera.
Hay mucha ansiedad en este momento con respecto a la pandemia del coronavirus. La situación sanitaria debe abordarse rápidamente, y a muchos les preocupa también el impacto en la economía.
Con las tasas de interés alcanzando mínimos de todos los tiempos en las últimas semanas, muchos propietarios están optando por refinanciar. Para decidir si refinanciar su casa es la mejor opción para usted y su familia, comience por hacerse estas preguntas
Con el desplome de la vivienda de 2006 a 2008 todavía visible en el espejo retrovisor, muchos están preocupados de que la corrección actual en el mercado de valores es una señal de que el valor de las viviendas también está a punto de caer.
Cada vez más economistas predicen que una recesión es inminente como resultado del retroceso de la economía causado por el COVID-19. Según la Oficina nacional de Investigaciones económicas:
Con todos los estragos causados por el COVID-19, a muchos les preocupa que podamos ver una nueva ola de ejecuciones hipotecarias. Los restaurantes, las aerolíneas, los hoteles, y muchas otras industrias están suspendiendo a los trabajadores o reduciendo drásticamente sus horas.
En el último informe ‘Housing Trends Report’, de la Asociación nacional de constructores de vivienda (NAHB por sus siglas en inglés) midió la proporción de adultos que planean comprar una casa durante los próximos 12 meses.
En un mercado donde el inventario actual es bajo, es normal pensar que los compradores podrían estar dispuestos a renunciar a algunas características deseables en la búsqueda de su casa un para hacer la búsqueda un poco mas fácil.
El valor de las viviendas ha ido aumentando durante 93 meses consecutivos, según la Asociación nacional de Realtors.
Se espera que al mercado de bienes raíces le vaya muy bien este año, ya que las tasas hipotecarias se mantienen en mínimos históricos. Un desafío para el mercado de la vivienda es la escasez de las viviendas disponibles para la venta.
Comprar una casa para invertir capital o con el fin de habitarla es una decisión transcendental en la vida de cualquier persona. Y lo es aún más si detrás de todo el proceso, existe un compromiso económico de una singular importancia.
Hay una narrativa actual de que ser propietario de una casa hoy es menos asequible de lo que ha sido en el pasado. La razón por la que algunos están haciendo esta afirmación es porque los precios de las viviendas han aumentado sustancialmente en los últimos años.
Si esta siguiendo lo que está pasando en el mercado de la vivienda en este momento, sabe que muchas personas creen que los meses de invierno no son buen momento para vender una casa.
Según un estudio del Instituto Urbano, los propietarios de vivienda que compraron su casa antes de los 35 años están mejor preparados para la jubilación a los 60 años.
A finales del año pasado, muchos de los propietarios de vivienda se encontraron con más plusvalía que la que ellos se imaginaban y al mismo tiempo sus salarios estaban aumentando.